El objetivo a la hora de crear este bus era conseguir una tasa de transferencia de datos micro-tarjeta gráfica superior a la que ofrece el PCI de 32 bits a 33 MHz, 132 MB/s. Esta tasa resulta suficiente para aplicaciones 2D, pero insuficiente (al menos en teoría) para las nuevas tarjetas 3D, que deben transmitir varios "megas" de texturas para obtener el máximo realismo.
En la actualidad, las placas para Pentium II con chipset LX y superiores ofrecen AGP, mientras que en el mercado de placas socket 7 (para Pentium MMX, AMD K6...) la mayoría de las placas lo soportan, pero no con chipsets Intel (como el TX) sino VIA o ALi, ya que a Intel no le interesa favorecer este mercado.
Tipos de AGP
Como muchas tecnologías jóvenes, AGP fue lanzado al mercado en cuanto estuvo preparado, aunque aún no se hubiera afinado del todo. Por ello, existen varios modos de AGP:
- AGP 1x: modo con bus de 32 bits y a 66 MHz. Su tasa teórica de transferencia máxima es de 264 MB/s. En la actualidad, pocas tarjetas de marca tienen sólo este modo.
- AGP 2x: modo con bus de 32 bits y a 66 MHz reales, o 133 MHz "virtuales" gracias al doble aprovechamiento de cada señal de reloj (una tecnología utilizada, por ejemplo, en la DDR-SDRAM). Su tasa teórica de transferencia máxima es de 528 MB/s. Es el actualmente usado por las tarjetas de calidad.
- AGP 4x: nuevo modo que se implantará en un futuro; aproximadamente 1 GB/s.
Sin duda alguna, el modo 1x es un modo "experimental", sacado al mercado con prisas. Su rendimiento es y será indistinguible del de PCI, así que su tiempo de vida ha terminado ya (excepto como modo para compatibilidad con tarjetas más antiguas). El modo 2x es el auténtico AGP, aunque como veremos tampoco es la panacea...
¿AGP o PCI?
That is the question. Para aquellos con prisa, mi conclusión: da casi lo mismo, depende del chip de la tarjeta. Justifiquemos esta arriesgada afirmación:
Los 528 MB/s del AGP 2x (el 1x ni comentarlo) son teóricos. La cuestión es que el chip tiene que repartir su acceso a la memoria con el canal AGP, y con las memorias actuales resulta imposible que se alcance esa cifra de 528 MB/s. Incluso con las SDRAM de 66 MHz (las EDO son ya historia), el ancho de bus de memoria es exactamente 528 MB/s, con lo que resulta evidente que si se le da todo al AGP, el micro se queda sin leer la memoria, lo que no puede pasar pues el ordenador no funcionaría, claro.
Así que el rendimiento del AGP 2x baja hasta menos de la mitad, con lo que la diferencia con el PCI se vuelve muy escasa, hasta el punto de que actualmente casi todas las tarjetas del mercado no ofrecen diferencia con bus AGP o PCI, o bien diferencias del orden de un 2%. Además, ni Windows 95 ni NT aprovechan algunas características importantes del AGP.
Conclusión: el AGP será un avance en el momento en que ocurra alguna (a ser posible varias) de estas cuestiones: que las memorias RAM sean aún más rápidas (memorias tipo PC100, que permiten un bus de memoria a 100 MHz de 800 MB/s), que el AGP supere el 2x (lo que dependerá del chipset) o que Windows 98 y NT 5 incluyan mejoras en el soporte software.
Mientras tanto, lo más razonable es comprar la mejor tarjeta que le ofrezcan, con independencia de si es AGP o PCI; si a igualdad de chip valen lo mismo, escoja sin duda AGP. Eso sí, si escoge PCI asegúrese de que la placa base tiene su slot AGP 2x para cuando en el futuro cambie la situación.