DFI NT70-SA: afinando al máximo el Pentium 4

En Otoño del año pasado, analizamos la DFI WT70-EC, una placa base para el Pentium 4 en formato Socket 423, con soporte de memoria RDRAM. El resultado de dicho análisis fue en líneas generales positivo, especialmente por la elevada relación rendimiento/precio resultado de la utilización del chipset Intel 850 y de su orientación hacia el mercado de montadores de PCs, el mercado "OEM" (principal fuente de ingresos de DFI).

Ahora hemos tenido la oportunidad de probar su sucesora para Pentium en formato Socket 478, la DFI NT70-SA. ¿Qué cambios ha sufrido, aparte del conector para el micro? ¿Cómo se comporta frente a las nuevas soluciones que han surgido en el mercado, para Intel y para AMD? Veamos...

Especificaciones: un clásico renovado y bien equipado

Las placas de la serie NT70 utilizan el mismo chipset Intel 850 para memoria RDRAM (Rambus-DRAM) que sus antecesoras WT70, lo que implica que las especificaciones dependientes de su arquitectura interna sean muy similares:

• Soporte de Pentium 4 Socket 478
• Bus de 400 MHz
• 4 ranuras RIMM para memoria RDRAM
• Incluye 2 módulos CRIMM
• Chipset Intel 850 (82850/82801)
• 1 ranura AGP 4x 1.5 V
• 5 ranuras PCI
• 1 ranura CNR
• Soporte ATA/100
• Sonido AC97 integrado
• 2 puertos USB + 2 opcionales
• Controladora RAID ATA/100 Promise
• Red 10/100 Intel, conector RJ45

En fin, lo cierto es que el diseño eléctrico apenas ha cambiado, y lógicamente la distribución de los componentes es casi idéntica. Se ha mantenido todas las características positivas de la WT70-EC (zumbador, sonido integrado... remitimos al amable lector al apartado correspondiente de dicho artículo), por lo que vamos a señalar las principales diferencias y mejoras entre ambos modelos:

La primera y más evidente, el uso del Socket 478. Éste es el conector más moderno para los Intel Pentium 4, tanto para los basados en el "viejo" núcleo de 0,18 micras y 256 KB de caché L2 (modelos hasta 2,0 GHz), como los basados en el novísimo núcleo Northwood de 0,13 micras y 512 KB de caché L2 (modelo "A" de 2.0 GHz y siguientes).

Como se aprecia en la foto, el tamaño de este zócalo es realmente minúsculo, 35 x 35 mm. (Por cierto, para nuestros lectores latinoamericanos, la moneda es de 1 euro y tiene 23 mm de diámetro.) Sin embargo, los ventiladores y disipadores necesarios para refrigerar un Pentium 4 son enormes, pues a 2.0 GHz el modelo de 0,18 micras disipa ¡más de 75 W!; eso sí, el modelo recientemente presentado de 0,13 micras disipa poco más de 52 W... lástima que sea tan caro.

En fin, en todo caso el nuevo zócalo tiene como ventaja adicional un nuevo sistema de sujeción del ventilador basado en "clips", mucho más sencillo que el primer sistema que se planteó para el Socket 423 y no menos seguro. La placa en sí está reforzada con una gruesa chapa metálica en su parte trasera, para aguantar el peso añadido sin problemas.

El siguiente cambio es la distribución de los conectores externos, donde el bloque de conectores USB y RJ45 (red) ha pasado a estar después de los serie y paralelo. Esta distribución no es tampoco "la más rara del mundo", pero necesita una chapa para la caja ATX distinta de la "normal". Afortunadamente, DFI ha incluido la chapa de conectores necesaria, lo cual es un detalle en el que no piensan todos los fabricantes.

Por otro lado, la ranura AGP tiene dos notables mejoras: la primera, un sistema de retención de la tarjeta gráfica: es una mejora barata de implementar pero más que necesaria en muchas ocasiones, sobre todo en equipos que van a ser sometidos a taslados. Y sí, yo tampoco comprendo por qué este sistema no se incluye SIEMPRE.

La segunda mejora es incluso más barata, pero aún más importante: una simple pegatina recordando que sólo deben conectarse tarjetas gráficas AGP de 1,5 V (generalmente, las AGP 4x modernas). ¿Por qué? Porque si se conecta una tarjeta a 3,3 V, como son muchas de las AGP 2x más antiguas, podríamos freir el chipset i850 (una limitación de su diseño, mucho menos seria de lo que suena). Se supone que las tarjetas y conectores deben seguir las normas AGP, de manera que sea físicamente imposible insertar la tarjeta en la ranura si el voltaje no es el correcto... pero no se fíe, siempre hay alguna tarjeta mal fabricada (sobre todo si es algo antigua) que podría entrar en la ranura AGP y destrozar nuestra maravillosa placa base. No viene nada mal un recordatorio de que debemos revisar las especificaciones de la tarjeta, aunque sea tan simple como esta pegatina. "Placa base prevenida vale por dos".

Y poco más podemos decir sobre este tema. La distribución de los componentes es, en general, excelente, especialmente en el caso de los conectores para discos duros y disquetera (a la derecha del todo), los del RAID (difícilmente interferirán con las tarjetas PCI) y el conector eléctrico principal.

Ah, precisamente en los conectores eléctricos se ha mejorado el diseño, de forma que ahora el ATX principal es el más exterior, ideal si vamos a intentar usar únicamente éste (si nuestra fuente no es compatible con la norma ATX 2.03, pero sí de unos 300 W y de buena calidad). Y el de 12 V está algo más arriba (más cerca de la fuente de alimentación, por tanto) y ya no tiene ningún condensador demasiado cerca.

Y otra opinión personal: hay quien dice que el conector de ventilador del micro está demasiado lejos de éste... chorradas. Gracias a eso está en una de las zonas más despejadas de la placa, sin NADA que pueda romperse al conectarlo o desconectarlo, y al menos yo no conozco ningún cable de ventilador tan corto como para no cubrir esos 6 cm de distancia.